Al transcurrir un viaje normalmente, tal y como se ha planeado, con mucho disfrute, tranquilidad y alegría, un dolor estomacal que sorprenda al viajero durante la noche tras una deliciosa cena en un restaurante de comida internacional, será un imprevisto. Y si eso sucede en un país donde se habla un idioma que no se domina, el imprevisto podrá convertirse en un problema serio.
Todo se soluciona si se tiene un seguro de viaje internacional que podrá impedir que el imprevisto arruine el viaje de quien está en el exterior.
¿Cómo es el funcionamiento de un seguro de viaje internacional?
El seguro debe brindar protección total al viajero durante estadía en otro país, sin importar el destino o el motivo de su viaje, dándole cobertura frente a cualquier eventualidad que pudiera surgir y complicar la salud y el bienestar del contratante.
Muchos de los seguros de viaje ofrecidos por correctoras de seguros son contra reembolso. ¿Qué es eso? Frente a un accidente o enfermedad repentina, el viajero deberá pagar los gastos que ocasionó la eventualidad y sólo será reembolsado cuando regrese, presentando las facturas originales de los gastos que ha tenido. Pero atención, porque será reembolsado de acuerdo al monto contratado al momento de comprar el seguro.
Hay compañías que brindan asistencia real en destino, esto es: el viajero recibirá no sólo la asistencia que necesite por una emergencia, sino que también recibirá el pago de los gastos que la emergencia requiera por el seguro contratado.
Existen tantos seguros de viaje como tipos de viajes que se realizan: viaje laboral, viaje de luna de miel, viaje estudiantil, viaje de egresados, viaje de aventura, viaje de placer… El valor y cobertura del seguro dependerá directamente del tipo de viaje y del tiempo que dure el mismo.
Los siguientes ítems NO TIENEN cobertura por seguros de viaje:
a) enfermedades preexistentes
b) enfermedades crónicas
c) drogadicción
d) alcoholismo
e) colocar la vida en riesgo intencionalmente
Referente a los ítems a) y b) es elemental destacar que sólo productos específicos detallados en el contrato cubren enfermedades preexistentes o crónicas y por un determinado valor.